Viscosidad sanguínea
Una
sangre más viscosa es más resistente al movimiento, lo cual implica que se
requiere una mayor presión sanguínea para que esta se mueva a través de los
vasos sanguíneos. Adicionalmente, una alta viscosidad sanguínea es un factor
que predispone a coagulaciones no controladas. En las personas sanas, un
incremento en la viscosidad sanguínea causada por una producción de células
sanguíneas de tipo defensivo y a la deshidratación causada por la fiebre por
enfermedades leves como la gripe es fácilmente tolerable. Sin embargo, en
pacientes con sangre de por sí muy viscosa, como aquellos con enfermedades
pulmonares, in incremento adicional puede conllevar a la coagulación sanguina,
al taponamiento de las arterias y por lo tanto a infartos obstructores o a
derrames internos. Incluso, la resistencia al movimiento de la sangre puede
llegar a ser tan alto que el musculo cardíaco o miocardio puede llegar a ser
insuficiente para empujar la sangre, lo que conlleva a un infarto del
miocardio.
La
viscosidad depende de:
·
Hematocrito
·
La
velocidad del flujo
·
La
agregación de los eritrocitos
·
La
deformabilidad de los eritrocitos.
·
EL radio del vaso.
PERFILES DE FLUJO
El flujo es función del área y de la velocidad
en el tiempo.
El perfil de flujo está determinado
fundamentalmente por tres factores:
Aceleración
Ésta
agrega un componente plano al perfil de flujo. Ésta es la causa principal del
perfil plano de flujo en las arterias periféricas. En ciertos lechos de órganos
nobles que necesitan flujo constante durante todo el ciclo cardíaco, de baja
resistencia (impedancia) periférica (como por ej. carótidas internas, vertebrales,
riñón) con flujo diastólico prominente, existe muy poca aceleración, de modo
que el perfil se torna parabólico.
En la
fase de desaceleración en la sístole tardía se resta un componente plano al
perfil de flujo, lo que puede ocasionar reversión del mismo cerca de las
paredes vasculares, de velocidad cercana a 0.
Relación de la ley de Poiseuille con el flujo
sanguíneo in vivo
Debido a que
esta ley física fue estudiada en condiciones de laboratorio en tubos rígidos,
¿cómo varía en un sistema circulatorio de flujo pulsátil, con arterias
elásticas, ramificadas y de diámetro decreciente?
La ley de
Poiseuille asume:
1. viscosidad
constante, o sea relación lineal entre fricción viscosa y gradiente de
velocidad (líquido newtoniano);
2. flujo
laminar;
3. capa
o lámina externa adyacente a la pared (interfase líquido-pared) con velocidad 0
(fenómeno de no deslizamiento o no slip page);
4. flujo
estable;
5. tubos
con paredes paralelas de sección circular;
6. tubos
no rígidos, inelásticos.
Hemodinámica.
La hemodinámica
es aquella parte de la biofísica que se encarga del estudio de la dinámica de
la sangre en el interior de las estructuras sanguíneas como arterias, venas,
vénulas, arteriolas y capilares así como también la mecánica del corazón
propiamente dicha mediante la introducción de catéteres finos a través de las
arterias de la ingle o del brazo.
Esta técnica
conocida como cateterismo cardíaco permite conocer con exactitud el estado de
los vasos sanguíneos de todo el cuerpo y del corazón.
Participantes de la circulación sanguínea
• ARTERIAS: Las arterias están hechas de
tres capas de tejido, uno muscular en el medio y una capa interna de tejido
epitelial.
• CAPILARES: Los capilares irrigan los
tejidos, permitiendo además el intercambio de gases dentro del tejido. Los
capilares son muy delgados y frágiles, teniendo solo el espesor de una capa
epitelial.
• VENAS: Las venas transportan sangre
a más baja presión que las arterias, no siendo tan fuerte como ellas. La sangre
es entregada a las venas por los capilares después que el intercambio entre el
oxígeno y el dióxido de carbono ha tenido lugar.
Las venas transportan sangre
rica en residuos de vuelta al corazón y a los pulmones. Las venas tienen en su
interior válvulas que aseguran que la sangre con baja presión se mueva siempre
en la dirección correcta, hacia el corazón, sin permitir que retroceda. La sangre
rica en residuos retorna al corazón y luego todo el proceso se repite.
CORAZÓN: Es el órgano principal del
aparato circulatorio. Es un músculo estriado hueco que actúa como una bomba
aspirante e impelente, que aspira hacia las aurículas la sangre que circula por
las venas, y la impulsa desde los ventrículos hacia las arterias. Tiene 4
cavidades, 2 aurículas y 2 ventrículos.
Las presiones intracardiacas.
La presión
intracardiaca o intravascular es la presión hidrostática ejercida por la sangre
contra la pared de las cavidades cardíacas o de los vasos.
En nuestro
sistema cardiovascular las presiones son resultado de varios factores, entre
los que se incluyen:
El flujo
sanguíneo o débito, las resistencias al flujo, la distensibilidad de los
ventrículos y de los vasos, la fuerza de contracción de los ventrículos, la
capacitancia del sistema, y la volemia.
En condiciones
fisiológicas, los ventrículos generan una presión sistólica que expulsa la
sangre hacia las grandes arterias, con una mínima resistencia intracardiaca a
la expulsión.
Este bolo (o
volumen) de sangre entra al sistema vascular arterial produciendo un aumento de
la presión, que dependerá del volumen expulsivo y de la distensibilidad y
capacitancia de las arterias.
Luego la
sangre fluye hacia los distintos órganos por medio de arterias y arteríolas,
que ofrecen una importante resistencia al flujo, determinando un descenso
significativo de las presiones entre las arterias y los capilares.
Finalmente la
sangre atraviesa el sistema capilar y entra al sistema venoso, donde su presión
está determinada fundamentalmente por la relación entre la volemia y la
capacitancia del sistema.
Los valores
normales de Índice Cardíaco fluctúan entre 2,6 y 3,4 L/min/m2.
Existen muchas
maneras de medir el gasto cardíaco. Las de uso habitual se basan en el
Principio de Fick o en las Curvas de Dilución.
Principio de Fick
Establece que
la diferencia de contenido de Oxígeno entre la sangre arterial y la sangre
venosa central es directamente proporcional al consumo de Oxígeno e
inversamente proporcional al gasto cardíaco (nota: el principio de Fick es
aplicable a cualquier órgano)
Presión sanguínea
Aunque
habitualmente se usan como sinónimos, la presión y tensión arterial no son lo
mismo.
La presión arterial, es la presión ejercida por la sangre sobre las
paredes de las arterias, mientras que la tensión arterial es la forma en que
las arterias reaccionan a esta presión, lo cual logran gracias a la elasticidad
de sus paredes.
Para
medir la tensión arterial se tienen en cuenta dos valores: el punto alto o
máximo, en el que el corazón se contrae para vaciar su sangre en la
circulación, llamado sístole; y el punto bajo o mínimo, en el que el corazón se
relaja para llenarse con la sangre que regresa de la circulación, llamado
diástole.
La presión de pulso es la diferencia entre
la presión sistólica y la diastólica. La presión se mide en milímetros (mm) de
mercurio con la ayuda de un instrumento denominado esfigmomanómetro Consta de
un manguito de goma inflable conectado a un dispositivo que detecta la presión
con un marcador.
Con el
manguito se rodea el brazo izquierdo y se insufla apretando una pera de goma conectada
a éste por un tubo. Mientras el médico realiza la exploración, ausculta con un
estetoscopio aplicado sobre una arteria en el antebrazo
Aunque a la
presión sanguínea se la confunde con la presión arterial, se puede distinguir
dos tipos de presión sanguínea:
Presión
venosa
Presión
arterial: Tiene dos componentes o medidas de presión
arterial que son:
v
Presión sistólica o la alta.
v
Presión diastólica o la baja. (DE
MICHELI, 2012)